Cómo usar un compresor: Guía básica de los 5 parámetros clave para dominar cualquier plugin

Al empezar a mezclar, el uso del compresor puede parecer un desafío, pero en muchos casos sólo necesitamos conocer bien el funcionamiento de los parámetros básicos para configurarlos de la manera correcta según nuestros objetivos.

En este artículo, vamos a desglosar los parámetros básicos de cualquier compresor para que, al terminar de leer, estés un paso más cerca de comprimir con confianza y elevar la calidad de tus mezclas.

Pero antes de empezar, ¿sabemos qué es un compresor y por qué es tan importante?

Un compresor es una herramienta fundamental en la mezcla de nuestras canciones. Su función principal es reducir la diferencia entre los sonidos más fuertes y más suaves de una pista, logrando una dinámica más controlada y agradable al oído. Aunque existen diferentes tipos de compresores, en esta guía nos enfocaremos en los cinco parámetros básicos que todo compresor tiene:

  • Umbral (Threshold)
  • Ratio
  • Ataque (Attack)
  • Liberación (Release)
  • Rodilla (Knee)

Dentro de los compresores que solemos usar para las mezclas, estos parámetros pueden variar o estar acompañados de otros más. Esto se debe a que, según el compresor analógico que emule el plugin, o si es un compresor totalmente digital, su funcionamiento varía y necesitamos mayor o menor control sobre su uso.

De esto hablaremos en otros artículos, por ahora, nos quedemos con los parámetros que vamos a encontrar en la mayoría de los compresores.

¿Cuáles son los parámetros básicos de todo compresor?

  • Umbral (Threshold)

El umbral determina a partir de qué nivel de volumen el compresor empieza a actuar. Por ejemplo, si establecemos un umbral en -10 dB, cualquier señal por debajo de ese nivel pasará sin ser afectada, pero cuando la señal supere los -10 dB, el compresor se activará y comenzará a reducir el nivel de esa señal.

  • Ratio

El ratio controla la cantidad de reducción que se aplica a la señal una vez que ésta supera el umbral. Por ejemplo, si el ratio es 2:1, por cada 2 dB que la señal exceda el umbral, solo se dejará pasar 1 dB. A mayor ratio, más intensa será la compresión.

  • Ataque (Attack)

El ataque es el tiempo que tarda el compresor en empezar a actuar una vez que la señal supera el umbral. Un ataque rápido (en milisegundos) permite que el compresor actúe casi de inmediato, lo cual es útil para controlar picos transitorios. Un ataque más lento permitirá que estos picos iniciales pasen antes de que el compresor actúe.

  • Liberación (Release)

La liberación determina cuánto tiempo tarda el compresor en dejar de actuar una vez que la señal vuelve a caer por debajo del umbral. Al igual que el ataque, se mide en milisegundos. Podés usar tiempos de liberación rápidos para una compresión más inmediata, o liberaciones lentas para un efecto más suave y gradual.

  • Rodilla (Knee)

La rodilla controla la suavidad con la que el compresor comienza a actuar cuando la señal se acerca al umbral. Una rodilla suave (soft knee) hará que el compresor actúe de manera más gradual, mientras que una rodilla dura (hard knee) provocará una compresión más abrupta cuando la señal alcance el umbral.

Te invitamos a ver en más detalle estos parámetros, y escucharlos en acción con ejemplos prácticos en nuestro video de YouTube: COMO USAR UN COMPRESOR | 5 Controles básicos para comprimir.

Una manera más simple de entenderlo

Existe una analogía popular para explicar en términos más simples cómo funcionan estos parámetros, vamos a verla:

Supongamos que estás en tu habitación escuchando música fuerte, y tu mamá pide que le bajes el volumen.

En este caso, el threshold es el volumen a partir del cual tu mamá pide que le bajes a la música. El ataque representa el tiempo que tardas en reaccionar desde el grito de tu mamá, hasta que por fin decidis bajar el volumen.

La rodilla, sería qué tan rápido bajas el volumen una vez que tocás el control, y el ratio representa qué tanto volumen terminas bajando.

Y la liberación, por otro lado, es cuánto tiempo tardas en volver a subir el volumen cuando tu mamá se va de la habitación.

Visualizar la compresión

Cuando trabajes con un compresor, es útil observar los medidores para ver cómo afecta a la señal. En muchos plugins, como en los digitales más conocidos, por ejemplo el Fab Filter pro C2, o algunos nativos de los DAW, podes ver una gráfica de reducción de ganancia.

Ésta te muestra cuánta compresión se está aplicando en tiempo real, y nos sirve de guía para identificar cómo afecta la compresión a la señal que estamos trabajando.

Ejemplo práctico: Controlando la dinámica de una voz

Un uso típico del compresor es suavizar las diferencias de volumen en una grabación vocal. Imagina que tenes una pista en la que el pre-estribillo suena más suave y el estribillo mucho más fuerte. Un compresor bien ajustado puede igualar estas diferencias de volumen, logrando que la voz suene más controlada y coherente en toda la mezcla.

Para este caso, podes probar lo siguiente:

  • Threshold: ajusta el threshold hasta que la compresión actúe principalmente en las partes más fuertes.
  • Ratio: un ratio suave, como 2:1 o 3:1, te permite comprimir de manera controlada sin aplastar demasiado la dinámica de la voz.
  • Ataque y Release: usa un ataque lento para dejar pasar los picos iniciales y un release rápido para que el compresor deje de actuar rápidamente y no comprima los siguientes.

Conclusiones

Aprender el funcionamiento de estos parámetros te permite no solo utilizar el compresor que más te guste, si no que saber aprovecharlos y aplicarlos a cualquier mezcla.

Pero, ¿cuál es el siguiente paso? hoy aprendiste cómo funciona un compresor, pero la teoría es sólo el principio. Te motivo a experimentar con estos parámetros en distintas pistas, en distintas mezclas, y con diferentes compresores.

Mientras más los uses, más vas a aprender a identificar cuándo una pista necesita ser comprimida, cómo realizar esta compresión, y el proceso se va a volver más intuitivo, logrando mejores resultados y más rápido.

Siempre nos apoyamos primero en nuestro oído, y usando bien la técnica y la teoría, logramos un resultado limpio, respetuoso con la producción, equilibrado, y profesional.

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